
[Cinismo puro y durio] CIU y PSC votan en el parlament dictamen sobre ausencia de corrupción en la sanidad catalana
En el colmo de la desvergüenza CiU y PSC han votados juntos
en el Parlament para aprobar un dictamen de la comisión de investigación sobre
la sanidad en el que se niega que haya corrupción o irregularidades.
Mientras se conocen en forma permanente los
negociados, corruptelas e irregularidades que rodean todos los procesos de
privatización en la sanidad pública catalana, estos señores pactan para que no
prosperen las investigaciones y en este caso dentro de la Comisión de
investigación sobre la sanidad. Tal pacto (en algunos momentos apoyados
también por el PP) ha impedido que otros grupos parlamentarios pudieran
denunciar las irregularidades en casos casos investigados judicialmente. Pero
no se trata solo de cinismo, sino que una vez más incumplen las funciones
inherentes a sus cargos, traicionando y estafando (una y otra vez) al pueblo
catalán al cual dicen representar en esta pantomina de democracia.
De esta manera lo informaba La Vanguardia:
CiU y PSC han
votados juntos en el Parlament para
aprobar un dictamen de la comisión de investigación sobre
la sanidad en el que se niega que
haya corrupción o irregularidades, mientras que PPC sólo ha
apoyado sus propuestas y el resto de grupos han votado en contra o se han
abstenido.
CiU y PSC, con la ayuda
del PP en algunas votaciones, han impedido en el pleno del Parlament
que prosperaran las conclusiones del resto de grupos que, entre acusaciones
de "farsa" y "fraude", pretendían denunciar
irregularidades por casos investigados judicialmente.
Entre estos casos, figuran los relacionados con
el grupo Innova de Reus (Tarragona), la fundación del Hospital de la Santa Creu
i Sant Pau de Barcelona, y el Consorcio de Salud del Maresme y La Selva, así
como la relación entre el Servei Català de la Salut (ICS) y la patronal
Consorcio de Salud y Social de Catalunya, el grupo Serhs y la empresa CCM
Estratègies i Salut.
CiU y PSC han vetado todas las
propuestas de conclusión de los demás grupos que dejaban entrever
comportamientos anómalos en los dirigentes políticos del sector sanitario y lo
único que han admitido es que "las irregularidades que se hayan podido
detectar en alguna institución no representan a la globalidad del sector".
En esta comisión de
investigación, que funcionó entre los meses de abril a julio, comparecieron 34
personas, entre ellas tres consellers o exconsellers -que son el actual titular
de Salud, Boí Ruiz (CiU), Xavier Pomés (CiU) y Marina Geli (PSC)- pero también
diversos cargos directivos de consorcios y patronatos sanitarios.
Fruto de la coincidencia entre CiU y PSC, en el
dictamen no se piden responsabilidades a los gestores sanitarios,
y que han estado en el foco de la polémica en los últimos meses e involucrados
en procesos judiciales, como el expresidente del Institut Català de la Salut
(ICS) Josep Prat, el exdirector del Servei Català de la Salut (CatSalut) Carles
Manté, el exalcalde de Lloret de Mar (Barcelona) Xavier Crespo y el
expresidente del Consorcio de Salud y Social de Catalunya y presidente del Grup
Serhs, Ramon Bagó.
El único aspecto aprobado del
dictamen que no ha merecido las críticas de ERC, ICV-EUiA, Ciutadans y la CUP
es el propósito de buscar más mecanismos de transparencia, impulsar un código
ético para mejorar las prácticas y mejorar la regulación de las
incompatibilidades de los gestores de la salud pública. Se propone, en concreto,
crear la Agencia de Calidad y Evaluación Sanitarias de Catalunya, dependiente
del Departamento de Salud, para que vele por la transparencia en este sector.
El diputado de CiU Albert Batet
ha indicado que las conclusiones son "coherentes" con "más transparencia
y regeneración democrática", y ha negado que el actual Govern tenga alguna
responsabilidad con los casos de irregularidades. Desde el PSC, Jordi
Terrades se ha limitado a pedir que las conclusiones no sean vistas como
"interferencias" a la justicia porque "la función del Parlament
es detectar las fragilidades".
En cambio, la diputada de ERC
Alba Vergés ha apuntado que el dictamen refleja intereses por encubrir
irregularidades puesto que las conclusiones "son superfluas y pasan por
alto la investigación", al tiempo que ha reprochado que "no haya ni
un mínimo de autocrítica por parte de los partidos que han gobernado la
sanidad: CiU y PSC".
El diputado del PPC Jordi Roca ha
lamentado que la comisión naciera "amputada" y concluya en
"papel mojado" con unas conclusiones "superficiales" y
"futiles", además de ironizar sobre "un PSC que quiere ser más
convergente que los convergentes".
Desde ICV-EUiA, Marc Vidal ha
tildado de "vergüenza" que el mensaje que se dé a
los ciudadanos con las conclusiones "cínicas" es el de "aquí no
ha pasado nada": "la comisión iba de pillos y tramposos",
pero "algunos partidos han hecho como la avestruz".
El diputado de Ciutadans José
Manuel Villegas ha acusado a CiU y PSC de preferir "taparse sus
vergüenzas" y el "politiqueo de bajos vuelos" antes que cumplir
con sus obligaciones con los ciudadanos, con unas conclusiones que son una
"farsa, un engaño y un apaño".
Desde la CUP, Isabel Vallet ha
denunciado un pacto de silencio y a CiU y PSC les ha acusado de "hacer el
ridículo más absoluto; dan mucha vergüenza".
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada